El santo Bautismo es el fundamento de toda la vida cristiana, el pórtico de la vida en el espíritu y la puerta que abre el acceso a los otros sacramentos. Por el Bautismo somos liberados del pecado y regenerados como hijos de Dios, llegamos a ser miembros de Cristo y somos incorporados a la Iglesia y hechos partícipes de su misión. (CCC)
¡Felicitaciones a usted padres nuevos!
Con gran alegría esperamos el día del bautismo de su hijo o hija. Para que podamos celebrar dignamente el sacramento ofrecemos charlas para los padres y invitamos a los padrinos también.
Cada bautizado necesita al menos un padrino o una madrina. Puede tener ambos. El papel de los padrinos es, sobre todo, dar ejemplo al niño. Por eso la iglesia requiere que el padrino o la madrina:
- ha recibo el bautismo, la confirmación, el la primera comunion
- tiene al menos 16 años
- lleva una vida congruente con la fe y con la misión que va a asumir
- no es ni el padre ni la madre del niño